Lo tienen bien ensayado. El asesino sabe que sólo su propio testimonio puede librarlo de la condena a muerte. Con la sala en completo silencio habla de enajenación, de verse desde fuera, sin control sobre lo que hace, como si fuera un muñeco actuando en una maqueta, copia exacta de la realidad. Mira su brazo extraño, con el que sueña cada noche bajando una y otra vez sobre la joven, hundiéndole un cuchillo en el pecho. Llora. El letrado aprovecha el momento, siembra dudas sobre el chapucero informe policial y consigue que el jurado popular empatice con el monstruo, enfermo sin duda.
Satanás, orgulloso del abogado, se vuelve hacia Dios con los ojos brillantes de júbilo, siente cerca la victoria y le dice, tu turno, al tiempo que voltea el reloj de arena y comienza a caer una fina lluvia de tic-tacs de oro.
Aprovecho le edición del librito que recopila una selección de microrrelatos que participaron en el II Concurso de Microrrelatos sobre Abogados para recuperar el micro seleccionado, "Tribunal Supremo". De paso publico algo que últimamente estoy seco y no se me ocurre nada.
ResponderEliminarAdemás de las virtudes evidentes del librito, tiene un interés quasi histórico al ser la única antología de micros de los últimos años, y si no, casi la única, que no tiene ningún micro de Manu Espada (ahora querido Manu es cuando debería teclear la combinación de teclas de guiñar un ojo, pero lamentablemente ignoro cuál es).
Un abrazo para todos.
Enhorabuena Jesus.
ResponderEliminarMe acuerdo de este micro magnífico y de la crítica esplendida que te hizo Ivan Teruel y que me permitió disfrutarlo aún más. Lo dicho: Enhorabuena.
Abrazos.
Gran micro, si señor.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias, Agus. Enhorabuena a ti también. También me acuerdo de la aparición de Iván con un comentario que hizo parecer al micro mucho mejor de lo que era.
ResponderEliminarMuchas gracias, José Antonio.
Es estupendo. Es un libro pequeño pero con grandes micros y este entra dentro de los superiores.
ResponderEliminarBesos a pares.
Es un placer coincidir con tantos amigos, Lola.
ResponderEliminarEnhorabuena y besos para ti también.
Hay algo que a cualquiera le resulta abrumadoramente halagador: que hablen bien de él allí donde no se le espera. Gracias Agus y Jesus por recordar mi comentario. Aunque discrepo de una cosa: mi análisis no hizo parecer mejor el micro; sencillamente creo que el micro es tan bueno como intenté demostrar; y aún creo que me quedé corto ;)
ResponderEliminarEnhorabuena, por supuesto. Como bien apunta Lola, el micro es superior.
Un abrazo grande.
Siempre es un placer verte por aquí... aunque sea para oírnos hablar bien de ti.
ResponderEliminarUn abrazo, Iván.
Muy bueno, Jesús. Abrazos.
ResponderEliminarQué bueno Jesús,
ResponderEliminarNo siempre leo todos los que seleccionan porque siempre ando como loca, pero este lo leí y lo recordaba como uno de los mejores.
Enhorabuena,
Rocío
Jaja, Jesus, este concurso se me da fatal. Creo que una vez me seleccionaron uno y dejé de participar hasta hace dos meses, pero nada tampoco. El tuyo ya lo había leído, me gustó en su momento, y me gusta mucho más ahora, reposado. Un abrazo, querido Jesus.
ResponderEliminarEnhorabuena, Jesús, por el estupendo micro y por la inclusión en este libro liliputiense, que he recibido hoy. Me alegra que viajemos juntos en esas páginas. Un abrazo
ResponderEliminarQué bueno Jesus, mira que es difícil hacer una obra de arte como esta encajando las cinco palabras. Enhorabuena por el librito, tengo los dientes largos, largos, ojalá algún día pueda compartir espacio. Y habría que hacer una petición a la CGAE, porque a mi me encantaría tenerlo, que amplien la edición, que tienen compradores. Un beso.
ResponderEliminarPues yo no lo conocía, así que bendita falta de inspiración ya que me ha permitido disfrutar, y mucho, de este microrrelato.
ResponderEliminarPor lo que intuyo el libro no debe estar disponible en ninguno librería. ¿Es así?
Saludos
Gracias a todos.
ResponderEliminarManu a mí también se me da muy mal este concurso, pero una vez salió bien.
Javier, a mí también me alegra mucho compartir páginas contigo. Enhorabuena a ti también.
El librito, pequeño pero coqueto, no se vende y no sé si se podrá conseguir de algún modo. Pero Maite, si no lo consigues dímelo y te mando uno de los míos por correo. Lamento no tener más.
Abrazos.
Leo cuanto comentas en los blogs y por ello crece mi admiración por ti. No soy escritora, no tengo blog, solo leo y disfruto de las maravillas que cuelgan aquí, quienes saben hacerlo y tú, eres de los mejores.
ResponderEliminarUn saludo cordialísimo
BB
Muchas gracias por lo que dices BB, encantado de verte por aquí.
ResponderEliminarAbrazos.
Me alegro mucho por esa publicación, Jesus. Aquí en la aldea lo hacemos todo con bits pero en ese mundo de ensueño que palpita y se extiende fuera de la red construyen con materiales más pesados. Tu cuento quedará impreso en esas páginas hasta que se descompongan (quizás dentro de unos doscientos o trescientos años; en todo caso mucho tiempo después de que mueras). Hacia el 2234 alguien leerá "Tribunal supremo" y soñará. Una obra bella.
ResponderEliminarAbrazos,
PABLO GONZ
Lo cierto, Pablo, es que por pequeñito que sea el libro, siempre hace ilusión ver un micro impreso. Y éste, además, tiene una bonita edición.
ResponderEliminarGracias por pasarte. Abrazos.
Uy, me lo pido, claro!!
ResponderEliminarMuy bueno, me ha encantado, que libro es ese? Ya me dirás, pero una vez más mi enhorabuena, lo haces genial. Muxuk
ResponderEliminarJoder, Jesús! Qué bueno!
ResponderEliminarUn abrazo.