Hoy os planteo un juego, un ejercicio si preferís. Veréis.
Hace un par de días publiqué un microrrelato muy breve en Facebook. Decía así:
Alivio
El huérfano sonríe tranquilo el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
El microrrelato gustó bastante y fue comentado. Como ocurre con frecuencia en Facebook, es un texto hijo de las prisas y la inmediatez. Reconozco que no me dejó muy satisfecho, en realidad muy poco, la expresión sonríe tranquilo. Es una expresión vaga, cómoda y perezosa que, además, provoca una lectura un tanto imprecisa que dio lugar a dos lecturas distintas. No es que yo esté en contra de los textos ambiguos o abiertos, como también se les llama con frecuencia, pero reconozco que aunque pueda verse como un síntoma de vida propia del texto, lo que no tiene nada de malo, también hay un punto de frustración en no conseguir expresar con precisión lo que quería contar.
En los comentarios se dieron dos versiones: en la primera, se interpretaba que el huérfano, por fin, entiende la razón de no recibir nunca regalos el día de Reyes, lo que le hacía sentirse malo. En la segunda, la sonrisa tranquila del niño se atribuye a que sus padres sobreviven de algún modo como Reyes Magos y esto le hace sentirse menos huérfano.
El juego que os planteo es muy sencillo: sustituye sonríe tranquilo por cualquier otra descripción gestual, corporal o de cualquier tipo, que consiga que solo una de las opciones sea posible, la que prefieras. Incluso que abra el texto a cualquier otra lectura que te sugiera, sin citarnos cuál es esta para poder, así, someterlo a la prueba de los lectores.
Ánimo. Espero vuestros comentarios.
Bueno, yo diría "sonríe cómplice" o "sonríe con complicidad" pero la sonoridad es peor.
ResponderEliminarYa sabes cual es mi versión :)
Un abrazo
El resultado es muy parecido, Ana. ¿No te parece?
EliminarBueno, entiendo que la complicidad está en ser parte del secreto de sus padres, que son los Reyes... le veo un matiz, pero igual no cambia tanto...
EliminarUna posible alternativa sería "recupera la ilusión", por el significado que le da al relato y por el contraste que supone con respecto a lo que le ocurre al común de los niños cuando descubren la verdad.
ResponderEliminarUn saludo.
Me gusta ese contraste que citas, Pedro, pero casi lo convierte en otro microrrelato al fijar el foco en una idea que en el original es muy secundaria.
Eliminar¡No estoy de acuerdo en que sea secundaria! Para mí, el mensaje principal del relato era precisamente ese cambio de foco: cómo un momento típico de nuestras infancias cambia totalmente de significado cuando se le aplica a un niño distinto (o cuyas circunstancias son distintas).
EliminarPero como "recupera la ilusión" me parece un poco abstracto, yo lo expresaría quizá como "sonríe ilusionado".
Hola Jesús. Yo leí el texto en Facebook y me gustó mucho (no recuerdo si comenté algo o no). Creo que es una microficción que está muy bien así como está. Considero que su fuerza se encuentra, justamente, en describir la reacción así, sin más detalles. Después, que trabaje el lector (que juzgue, que interprete).
ResponderEliminarSin caer en darle al lector datos inconexos (y "Alivio" no incurre de ninguna manera en ese error), creo que en la microficción debe haber posibilidad de múltiples interpretaciones, de polisemia.
Yo lo dejaría tal y como está, sin dudas.
Un abrazo!
Seguramente tienes razón, Leo. Sin embargo me pareció divertido e instructivo intentar que la ambigüedad del texto estuviera siempre controlada por el escritor y no en manos del azar, aunque la colaboración del lector pueda acabar convirtiendo el micro en algo que no calculaste.
EliminarAlivio
ResponderEliminarEl huérfano republicano llora el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
(Aunque habría que cambiar el título por "Decepción" o algo por el estilo.
Te me fuiste por los cerros de Úbeda, Manu, pero me has hecho reír. Sin duda sería una gran decepción.
Eliminar"ya lo sabía", "remolonea"...
ResponderEliminarBuen micro, Jesus. A mí me gusta con la expresión original, queda más indefinido.
Un saludo.
Al margen de gustos, José Antonio, a mí no me importa demasiado que se les encuentren a mis textos sentidos que yo no contemplé, no sabría decir cuál pero creo que tienen una virtud. La pregunta que me surge a veces en esos casos es si el hecho se produce debido a mi destreza o a mi torpeza. Si sonó la flauta, enfín, por casualidad.
EliminarAliviado parece lo más recto y directo...
ResponderEliminarBesos
Aliviado fue el primer adjetivo que contemplé, Susana, y me gustaba. Pero luego creí que quedaba mejor en el título. En todo caso, no resuelve la polisemia del texto.
EliminarEl huérfano se deshace del tirachinas el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
ResponderEliminarCreo que das en el clavo, Javier. Señalar una mala acción que deja de hacer, subraya el sentido de la comprensión del huérfano de la ausencia de regalos. No sé si cambiaría la forma pero la idea es perfecta.
EliminarOlé, me alegro de haber acertado. Creo que la línea que tomaría está clara... Un saludo.
EliminarBueno, no hablaría de acierto, Javier, menos cuando ignoro la respuesta. Es mi opinión. Si miras un poco más abajo, Antonio Tello lleva tu línea un poco más allá.
EliminarYo diría que lleva la línea por caminos diferentes, ¿puede ser? Mi personaje (tu personaje) jamás volverá a ser malo; el de Tello, es probable que sea mala persona de adulto. ¿Puede ser? Mi propuesta la veo más cerrada mientras que con la de Tello podríamos continuar diciendo cosas.
EliminarMe sorprende lo que dices, Javier. A ver si lo entiendo: como dices, en tu historia el huérfano creía ser malo por no recibir regalos. Cuando descubre que no recibirlos está justificado, los Reyes son los padres y él no tiene, decide dejar de ser malo, o al menos dejar de tener esa idea de sí mismo. En el caso de Antonio diría que el huérfano saca su rencor y su rabia y, como dices, es fácil que sea malo toda su vida. De acuerdo. Lo que me sorprende mucho es que veas que un final feliz es más cerrado que un final no feliz, como si un poco al estilo de Hollywood, una historia no terminara hasta todo acaba bien. En las dos hay resolución de conflicto, las dos están terminadas.
EliminarHas entendido a la perfección lo que quería decir, pero matizo algo. Más que "continuiar diciendo cosas" quería decir que el final de Tello puede ayudar en mayor medida a desarrollar en el lector cierto pensamiento que mi relato, quizá más cerrado, más típico del "niño se vuelve bueno, como debe ser", etc. Pero es jusatamente porque si el final "es no feliz" creo que da mucho más juego que un final feliz. Al menos, yo soy partidario de los finales no-felices (que no por ello infelices). No sé si aclaro con esto lo que quería decir o termino de liarlo más... Porque ahora parece que diga lo contrario que dije pero no es eso lo que pretendo. De hecho, repasando tus comentarios es cierto cuando dices que el final de Tello está llevado más allá. Pero por eso mismo, por estar llevado "más allá", lo considero menos cerrado que mi propuesta, pero ¡ojo! que eso no quiere decir que peor, sino más bien al contrario: su relato daría más pie a interpretaciones que el mío.
EliminarPor alusión voy a entrar en la charla. En realidad creo que la variante que propongo no altera en esencia la propuesta original.
EliminarEl huérfano es un ser afectivamente mutilado; un niño que no alcanza a comprender la razón de esa orfandad que lo hace diferente a los demás niños. Quizás para él, la existencia de los Reyes representa la esperanza de un amparo y de una amor que lo acerca y lo iguala a los demás. Y quizás por esto, al enterarse que los Reyes son los padres, sabe que esa esperanza también ha muerto y su orfandad y su desamparo se hacen más grandes. Es por ello que, en su inmadurez, reacciona con rabia, resentimiento revolviéndose contra la vida.
El final feliz o no feliz no resuelve la historia nunca, porque la vida continúa. Un poema, un cuento, una novela o un microrrelato son siempre fragmentos de ella.
Por cierto, un placer comentar tu blog. Sería un honor que te pasaras por el mío y comentaras (ni de lejos es tan bueno como este,pero conserva su orgullo jeje). Saludos.
ResponderEliminarClaro, Javier, será un placer. Gracias por pasar por aquí y comentar.
EliminarRespecto al juego que propones, entre ambas opciones me gusta más un "El huérfano derrama lágrimas confortado el día que le cuentan que los Reyes son los padres".
ResponderEliminarAunque a mí me pide más el cuerpo un "gruñe escéptico" o incluso un "escupe asqueado".
Un saludo.
Nos leemos.
Parece un poco convencional que el huérfano derrame lágrimas, Pedro, aunque el hecho de que lo haga confortado aporte un contrapunto interesante. Incluso "derramar lágrimas" tiene un algo de frase hecha que preferiría evitar. Las otras dos opciones que das me gustan más por lo que obligan, pero creo que en ambos casos dejas el éxito de la misión en manos del azar porque, con franqueza, no soy capaz de decir lo que ocurre así que imposible anticiparme a la interpretación del lector.
EliminarA mí me chirría el "tranquilo". Así que, sencillamente, lo suprimiría. El "Alivio" del título completa la actitud del niño y el texto a la perfección.
ResponderEliminarCompletamente de acuerdo, David. "Tranquilo" chirría, no pinta nada y suma una palabra más. Yo también creí que el título dejaba claro de lo que se hablaba, pero al ver que no es así os he pedido vuestra opinión.
EliminarQuizá, el texto podría plantear en su núcleo una pugna de contrarios. El "tranquilo" es, como bien dices, propio o común al verbo "sonreír", así que podrías buscar una expresión alternativa, reconocible al verbo llorar y asociarla. Algo como "desolado", o "sin consuelo". No sé, Jesus, no me hagas mucho caso.
ResponderEliminarAbrazos.
El huérfano sonríe desolado el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
Es un buen recurso creativo el que comentas, Agus, y como idea me la quedo. En lo concreto no acabo de ver el resultado, no consigo entender lo que sugiere que sonría desolado. Y además estoy seguro, lánzate, de que has pensado más de una o dos opciones más extravagantes, absurdas, surrealistas.
EliminarMe gusta tal cual, creo que le di al Me gusta en facebook. Pero voy a jugar:
ResponderEliminarAlivio
El huérfano sonríe burlón el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
Besitos
Ese burlón, Elysa, a mí me invita a creer que eso de que los Reyes eran los padres lo sabía él desde hacía tiempo. O que no está dispuesto a creelo. En ambos casos, elimina la acción del micro y, por lo tanto, no hay reacción. Pero es solo mi opinión, tan válida como la vuestra.
EliminarJesús, no soy dado a entrar en juego, pero acepto tu propuesta lúdica, no sin antes decirte que el micro es redondo, que me gusta su ambigüedad y que lo único que sobra para mí es "tranquilo".
ResponderEliminarPero si es de señalar una orientación me inclinaría por las posibles secuelas de resentimiento de la orfandad en el espíritu de ese niño, que al tener conocimiento de las causas de sus carencias reacciona con rencor y, como verás, crueldad. Es más, lo pasaría al pretérito para que sonase más fuerte.
"El huérfano cerró su puño y reventó el poyuelo, el día en que supo que los Reyes eran los padres.
Antonio, te lo agradezco en especial porque me gusta mucho tu propuesta. Está en la línea de la de Javier, subrayamos una acción de maldad. En el caso de Javier, la comprensión de los hechos ayuda al huérfano a superar su condición. Tú, sin embargo, vas un paso más allá y llevas al huérfano a descubrir que su maldad no es una consecuencia de los sucesos de su vida, lo que favorecería la expiación, sino que los hechos de su vida son consecuencia de su maldad. Y tiene una fuerza brutal.
EliminarAparece una leve sonrisa cuando al huérfano le cuentan que los Reyes son los padres.
ResponderEliminarYo lo veo así, completamente ambiguo y visto desde fuera. (por que pusiéramos "en su rostro" quedaría horrible)
En fin, no sé, por meterme donde mo me llaman.
Abrazos
Aparece una leve sonrisa cuando al huérfano le cuentan que los Reyes son los padres.
ResponderEliminarYo lo veo así, completamente ambiguo y visto desde fuera. (por que pusiéramos "en su rostro" quedaría horrible)
En fin, no sé, por meterme donde mo me llaman.
Abrazos
Perdón, polluelo. Como estaba sentado en mi poyo no me di cuenta del pollo en el que me había metido.
ResponderEliminarHay una leve sonrisa cuando al huérfano le cuentan que los reyes son los padres.
ResponderEliminarDespersonalizar la accion de sonreír lo hace más ambiguo, pero sabemos que es él quien sonríe, pero poner (en la cara del huérfano)sería horrible. A la vez introducimos una visión exterior.
No sé, me parece, nadie me manda a meterme en camisas sin canesú.
Desde luego me gusta más así que la sonrisa tranquila del original. Pero en cuestión de ambigüedad estaríamos en las mismas. Y me dirás ¡pero qué manía con la ambigüedad! Es solo un juego, el de la precisión concreta. Hoy es el día del lector vago al que queremos darle todo masticado. O casi.
Eliminar¿Y esto? "El niño abrió la ventana y saltó el día que supo...". Un poco macabro, ya.
ResponderEliminarAcabo de descubrir tu blog; hasta ahora sólo "te tenía" en facebook. Te seguiré también por aquí. Un saludo
Bueno, a mí me gusta lo macabro, Ernesto, eso no me importa. Y es cierto que el hecho de que salte por la ventana te lleva a plantearte muchas preguntas. Pero es un poco arriesgado dejarle al lector tanto por resolver. Que a veces sale bien, no lo niego. Ahí está el maldito dinosaurio.
Eliminar¿Y esto? "El huérfano abrió la ventana y saltó el día que supo...". Un poco macabro, ya.
ResponderEliminarAcabo de conocer tu blog. Hasta ahora, sólo "te tenía" en Facebook. Te seguiré también por aquí. Un saludo
El huérfano se arrepiente con amargura el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
ResponderEliminarYa lo había leído en fb y me había gustado, Jesus. El ejercicio me parece fantástico.
Abrazos.
En tu propuesta, David, me falla una cosa. ¿De qué se arrepiente el huérfano? Claro, puedo intentar imaginarlo, pero tu propuesta es demasiado vaga, deja demasiadas cosas en manos del lector. Si el lector coopera y es muy imaginativo tal vez salga una historia muy buena pero ¿y si no?
EliminarEllos lo sabían, de alguna manera lo vieron todo.
ResponderEliminar...Por eso no venían...
El huérfano suspiró aliviado cuando le contaron que los Reyes son los padres.
Me apeteció darle una vuelta más a la maldad, con una pizca de candidez. Quizás podríamos titularlo Liberado...
Unknown, disculpa mi torpeza pero no consigo entenderlo.
EliminarTienes razón, no se entiende muy bien, Jesús.
EliminarQuizás mejor si en la primera o en la segunda frase se explicita que leemos lo que creía el huérfano hasta hoy:
Ellos lo sabían. De alguna manera lo vieron todo.
...Siempre había pensado que por eso no venían... Hasta hoy: El huérfano suspiró aliviado cuando le contaron que los Reyes son los padres.
(al fin libre de toda sospecha)
un poco parrimacabro y poco claro, sorry
Mi propuesta es "finge sonreír" o "compone una sonrisa fingida".
ResponderEliminarAhora bien, confieso que sólo he pensado en ella debido a tu propuesta, dado que cuando lo leí en FB me pareció un hiperbreve con mucha potencia, en cualquiera de las interpretaciones a la que se prestara y pensé que ese "sonríe tranquilo" -que puede parecer manido- le daba al texto un toque de naturalidad.
Un abrazo,
Finge sonreír, Pedro, aporta de nuevo muchos matices y temas sobre los que pensar. No añade concreción, pero es una frase interesante. "Compone una sonrisa fingida", sin embargo, me parece una frase un poco terrible a la que no le encuentro justificación, en la forma al menos.
Eliminar¿Y si le damos una vueltita?
ResponderEliminar"El huérfano sonríe irónico porque hace tiempo que sabe que los padres no son los Reyes"
Anónimo, me resulta un poco compleja tu versión, no sé si acabo de verla. Tampoco acabo de ver la sonrisa irónica, me cuesta imaginarla. Además no se sabe a qué responde que el huérfano sonría ahora, con o sin ironía.
EliminarIgual queda un poco ñoño:
ResponderEliminarEl huérfano sonríe a la ventana el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
Yo entendí que el crío puede pensar que aún hay unos padres para él por ahí. La ventana sería el puente entre el niño y las visitas, el cielo, lo que sea.
Abrazo
Gabriel
Me gusta la idea, pero la ejecución la veo demasiado general. Esperar que se entienda esa función de puente que hace la ventana creo que es mucho pedir. Me parece que iba a ser un distractor, que el lector iba a buscar qué es lo que el niño ve por la ventana. No sé.
EliminarEl niño huerfano dejó de sentirse ambas cosas el día que le cuentan que los reyes son los padres.
ResponderEliminarPues ahí va, Jesús. Y si no, le quitaría el tranquilo, y le añadiría ENTERO, quizá.
Abrazos.
Me gusta el fondo, pero no me convence la forma. "...dejó de sentirse ambas cosas..." no me gusta.
EliminarCuando dices ENTERO, entiendo que te refieres a "con entereza". Quizá la entereza sea una reacción más adulta, pero tal vez funcione.
No, Jesús, me refiero a ENTERO.
EliminarEl huérfano sonríe entero el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
Y conlleva entereza y que sonríe no sólo con la boca.
El otro, y sigo jugando, podría quedar: Dejó de sentirse niño y huerfano el día que le cuentan que los reyes son los padres.
Una "sonrisa pícara" ante el descubrimiento otorgaría al niño libertad de actuación pues ya sabe que no tendrá recompensa por sus buenas acciones y por las malas... ya veremos. Yo lo vi así.
ResponderEliminarMe gusta, Marisa. Es visual, no resuelve polisemias, pero me gusta, más que tranquilo, al menos.
EliminarYo lo vi un poco como Marisa, y
ResponderEliminarpor tocar las narices y darle el toque "oscuro" que a mí me gusta mucho en algunos micros.
Está contento porque todos los niños viven una mentira y se lo piensa contar a todos los que no lo saben, que al final todo es una mentira, y ahora ya hsta eso le da igual, ni tiene padres ni tiene Reyes. Todos los niños desilusionados...
Yo dejaría sonrisa sin más. Me parece que tiene un montón de connotacones respecto al conexto, a los que has dicho antes y así se puede interpretar.
Por cierto, cuál es tu versión?
Al final lo que importa es si querías decir algo muy muy concreto o si te da igual que una vez que el micro vuela solo, tenga muchas lecturas diferentes. Mira el dinosaurio de las narices, a saber qué quiso decir Monterroso, interpretaciones muchas, algunas hasta enrevesadas.
mUXUK
Jajaja, el lado oscuro. Mi versión es la que sale en la entrada. La cuestión no es si me importa o no que se le encuentren más sentidos, me gusta que un microrrelato tenga varias lecturas, claro. Era hacer un ejercicio de precisión. Es difícil decir en muy poco espacio lo que se quiere decir de una forma inequívoca e insustituible.
EliminarSí que es difícil sí.
EliminarAunque no te creas en poco y en mucho espacio ;)
Espera que pedías opciones...
EliminarEl huérfano sonríe el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
Pues eso sin el tranquilo soríe solo...ahora bien cambiaría el título. Aunque por otro lado, para lo que tú querías expresar es perfecto y creo que evita la ambigüedad que decías. Alivio completa el texto. Así que así lo dejaría
Alivio
El huérfano sonríe el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
El cambio del título sería para el micro perverso ;)
Muxuk
El huérfano entiende al fin, el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
ResponderEliminarDemasiado explicativo para mi gusto, Carolina. E irónicamente, pese a explicar que el niño entiende, no nos sirve para acotar qué es lo que entiende. Por otro lado ese "al fin" viene a decir que lo llevaba esperando desde hacía tiempo, cuando creo que en este caso encaja mejor la sorpresa.
EliminarEl huérfano levanta la vista al cielo, el día que le cuentan que los reyes son los padres.
ResponderEliminarMe encanta este juego. Gracias!
Me alegro de que te hayas divertido, Carolina.
EliminarA mí me parece un micro estupendo, Jesús, con su balanceo sugerente entre lo explícito y lo ambiguo.
ResponderEliminarSe me ocurre, también, un homenaje a Monterroso:
"Cuando el huérfano despertó, los reyes roncaban en el dormitorio de al lado"
Abrazos.
Jajaja, me encanta, Miguel Ángel, excelente homenaje. Por cierto, si me permites (que no sé cómo contactar contigo), quiero felicitarte por ser finalista del Setenil y te deseo la mejor de las suertes.
EliminarAbrazos!
Yo le pondría un delfín. Quiero decir, un al fín.
ResponderEliminarEl niño sonríe al fin, el día que le cuentan que los Reyes son los padres.
Me gusta tu delfín, Alberto. Lo consideraré.
EliminarTambién podrías poner "sonríe aliviado"
ResponderEliminarDe alguna forma se puede sentir así al pensar que si tuvo regalos de reyes fue porque de alguna forma sus padres estaban detrás.
Hola Je, creo que llego un poco tarde para el juego...
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